martes, 2 de julio de 2013

DEL ARROZ AMARGO ( 9 ) LOS PROBLEMAS DE RIEGOS DEL ARROZAL. II parte, 1985 - 2013


  LOS PROBLEMAS DE RIEGOS DEL ARROZAL. ( II parte,1985- 2013)

Lo verdaderamente importante de este post es que hago una valoración de los daños sufridos por el sector dese el año ´82 que según mis cálculos equivale a la pérdida de la totalidad de CINCO COSECHAS Y MEDIA evaluando la producción promedio de 32.000 has a 8.000 kg/ha la cosecha media perdida es superior a las 250.000 tn. que multiplicado por 5.5 arroja unas pérdidas de 1.375.000 tn. que a precio actual de 300 €/tn valdrían en el mercado más de 400 MILLONES/€.

13 Mayo 2013. (foto de José Sanchez)  Marea alta con agua dulce en Coria del Río.

Aunque sea empezar el capítulo por el final es llamativo ver el Guadalquivir lleno hasta los borde después de la Primavera más lluviosa de los los últimos años. 862 l/m2 llovieron en la cuenca desde Octubre a Mayo y hacía muchísimos años que no podíamos entrar a preparar las tierras, por lluvias, hasta primeros de Mayo. Las lluvias incesantes de Marzo y algunas de Abril nos impidieron empezar pronto pero nos garantizan cuatro o cinco años, mínimo, de agua buena.
En la siguiente foto y, antes de empezar con la problemática de los riegos, vemos la dicotomía arroz-navegación del río, que al final es la causa de la mayor parte de los problemas ya que de no tener que dragar el río constantemente, para la entrada de los barcos al puerto de Sevilla,  la barrera natural que se forma en Sanlúcar sería suficiente para mantener el tapón salinos en unos niveles aceptables de salinidad y altura en el río, sin apenas tener que enviar agua para mantener el mar en sus dominios naturales, es decir, de la playa hacia dentro.


El arroz en Isla 12/06/2013 y la silueta del barco al fondo por encima del muro de contención de primeros del siglo XX

Después del estudio que realicé sobre los problemas en los regadíos de la Cuenca del Guadalquivir en el ´83 ya no dispongo de otro estudio propio donde poder examinar éstos problemas de riego con la precisión de los años anteriores, pero podemos apoyarnos en algunos estudios de CHG y de otros autores para ver sus números e interpretarlos de acuerdo a nuestra opinión. Por ejemplo este cuadro de la CHG actualizado a 1990.
Durante esos años y hasta el ´92 yo formaba parte de la Comisión de Desembalses, como representante de la Comunidad de Regantes de la Ermita y Presidente de la Federación de Arroceros de Sevilla disponía de datos suficientes para saber que estaban desangrando al sector arrocero en beneficio de otras Nuevas Puestas en Regadío que se realizaban antes de tener el agua con la que las tenían que servir.
Tanto era así que recuerdo mi decisión de dejar de pertenecer a la Comisión por la indefensión a la que estábamos sometidos y más o menos dije en mi última intervención que "renunciaba a continuar porque una persona sensata nada tenía que hacer allí en beneficio del sector, más bien había que nombrar alguien que no estuviese tan informado como yo de las enorme deficiencias que sufríamos en la Cuenca, por culpa de la Administración, y que, el que entrase nuevo, exigiese nuestro derecho al agua sin más consideraciones ni contemplaciones"


Aclaremos que el caudal medio en la Presa de Alcalá es una cifra que no aclara  fehacientemente la gravedad de nuestros problemas ya que son medias de toda la campaña y la mayor parte de los años sólo sirven como orientación, cuando son muy bajas, pero es posible un año muy malo de agua salada con unas medias buenas ya que podemos tener un inicio de riegos y una campaña muy mala y unas grandes tormentas a finales de campaña con medias en Alcalá de 80 ó 100 m3 durante varios días, harían que las medias generales fueran  aceptables para una campaña normal, que por supuesto no se vería reflejada en la cosecha.
Sin embargo, sí es significativa la aportación de agua, en la Presa de Alcalá, con los resultados agronómicos en los años totalmente desastrosos  como el  ´82, ´83, `89 y ´90, cuando durante el ´83 no sembramos y no se midió nada en Alcalá, -aunque sí había caudal ecológico que aquí no se refleja-, y en el ´89 en el que sólo se sembró un tercio de la superficie.
Tampoco la salinidad media es un cifra que tenga algún sentido. ¡Qué nos importa que la salinidad media del ´90 sea de 1.15 y 0.72 si tuvimos que regar en Ermita, Quiepo y Cotos durante muchos días  con una salinidad en el agua por encima de tres gr/l! ¡ Qué le importa al que se muere de hambre, que la media en España sea de 100 pollos por habitante y año, si él se como sólo uno! ¿quién se come los 99 que a él le pertenecen por cálculo matemático, si él sólo comió el de  Navidad, y el resto no  los ha visto?
Por último es absolutamente irrelevante y distorsionador hablar de medias de salinidad sin explicar lugar y días de toma, al igual que no sirve para nada comparar has sembradas y m3 soltados para el arroz sin explicar que "no es un tercio del agua, que se destine al arrozal, la que es útil, sino que para mantener el tapón salino en un lugar aceptable se perderá  una cantidad constante que, en situaciones normales, estará en el entorno de los 130 Hm3 año". Si se sueltan 400 Hm3 en Alcalá y detraemos los 130 Hm3 destinados a mantener el tapón salino, en lugares aceptables, nos quedan 270 Hm3 para regar las 25.000 has que toman agua directa y eso significará que podemos llevar a cabo una cosecha normal. Pero si sueltan 250 Hm3 para regar 20.000 has al restarle los 130 `para mantener el tapón nos quedarán 120 Hm3 para toda esa superficie cuya evaporación y evapotranspiración es superior a esa cantidad por lo que a la fuerza se iniciará la entrada de agua salada en el momento en el que produzca el desequilibrio.

El primer crucero trasatlántico que entra al Puerto de Sevilla, gracias a las nuevas esclusas.


Extracto comisión Desembalses Febrero 1991

En este extracto parcial del acta de la Comisión de Desembalses de Febrero de 1991 se aprecia la agonía que vivía nuestro sector, no sólo en el ´89 que sembramos un tercio de la superficie, sino también en el ´90 y ´91, que a pesar de que sembramos toda la superficie los rendimientos por ha fueron bajos, aunque tampoco esa cifra de promedio indica la desesperación de los agricultores del sur de Isla cuya tierras reciben un agua de peor calidad en unas  tierras que distan mucho de estar desaladas.
Pero en este pequeño Recorte del Acta de la Comisión de Desembalses,  podemos apreciar dos efectos "muy nocivos" de la política de aguas que se estaba llevando a cabo en la C.H.G., impuesta por el Gobierno Central y la Junta de Andalucía.
Por una parte vemos que cada año las reservas de agua quedan esquilmadas y que no existe la regulación hiper-anual. Después del ´83 vienen unos años que, si bien no fueron excesivamente lluviosos, son los mejores de la década y cuando termina el ciclo "húmedo" en el ´88, nos quedamos sin reservas el primer año y ya en el ´89, año "seco" no podemos sembrar toda la superficie por falta de agua y como contrapartida nos ocurre lo mismo que el año ´83 ( que no sembramos el arrozal pero pusieron en Nuevos Regadíos unas 10.000 has), e  incrementan en 14.700 has la superficie de riego, sin tener terminados los embalses que tienen que servir esas tierras. Desde el ´89 al ´91 solamente se ha incrementado la capacidad total de la Regulación General en 229 Hm3, pero en unos años en los que no ha llovido suficiente para poder aprovechar la nueva capacidad de almacenamiento de agua.
Y vemos el año ´90, con una superficie del 34.000 has y una media en Alcalá de 23 m3/seg. Esas cifras no sirven para explicar cómo se pudo sacar a delante la cosecha de arroz. Aquí faltan datos que ya no recuerdo pero que permitieron ese "milagro"; como podría ser que llenáramos la marisma con agua de escorrentía, de algunas providenciales lluvias de primavera, y que no se contaron en esa media.
En el ´91 la situación en Febrero era equivalente a la del ´89 y las previsiones de riego para el arroz no llegaban ni siquiera al agua necesaria para regar un tercio de la superficie. Nuevamente las lluvias de primavera salvaron la campaña. Este hecho, de salvar la campaña de riegos a última hora,  es muy normal en nuestra cuenca donde había desaparecido la cobertura de reserva hiper-anual y donde disfrutamos de un ciclo de lluvias muy irregular, normalmente más abundantes en Otoño y Primavera, otras veces con inviernos lluviosos, pero los menos,  y unos meses de verano absolutamente secos, con la posibilidad de alguna tormenta local a finales de Agosto o en Septiembre. Tormentas de verano que más de un año han salvado parte de la cosecha en ese reparador aumento de caudales en Alcalá.
A pesar del desastre hidrológico del año ´90 en la Comisión de Desembalses de Abril del ´91 la situación había mejorado y ya disponíamos de 1.100 hm3 que permitía dotar de 4.500 m3/ha, en cabecera de canal, a las zonas regables y 20 m3/seg en la presa de Alcalá para el arroz. Sembramos la totalidad de la superficie. Por suerte las lluvias de primavera dotaron el río de agua para el llenado y alguna ayuda exterior de R.G. recibiríamos ya que la media de la cosecha fue superior a la del ´90.

Cruce de barcos a final de la curva frente al Restaurante Esturio.




Media en m3 total x ha.

Arroz presa de Alcala
Arroz sembrado

Año 1992
2100
Zonas regable
20 m3
20.000

Año 1993
          180
Solo cultivos
Permanentes
2900

Año 1994
          260
Riegos apoyo
Caudal ecol.
6400

Año 1995
0


1200


                    

Estos han sido los cuatro, años continuos, más catastróficos del sector arrocero y su supervivencia ha sido gracias a las subvenciones de la UE. Sin esta ayudas la mayor parte de los pequeños y medianos agricultores no hubieran podido sobrevivir sin vender,- más bien hubiese sido regalar-, sus parcelas de arroz.
Esta vez no puedo achacar a la administración la culpa de este desastre en los riegos de la Cuenca.Los siete años de vacas flacas que habíamos atravesado eran de una aridez desconocida e imprevisible en Andalucía. No es económicamente viable construir una red hidrológica que garantice el 100% de los regadíos en un período de retorno de 500 años. Sin embargo me gustaría saber cual ha sido el criterio de seguridad establecido en nuestra cuenca que nos ha llevado a catorce años seguidos de problemas de riego, llegando al colmo al contar en cuatro años con un total de agua equivalente e un tercio del agua correspondiente a un año.
Tampoco el sector arrocero puede chillar demasiado cuando en los años ´80, en plena crisis de déficit hidráulico aumenta en 7500 has de cultivo de arroz, escudados en la anulación de la Ley de Cotos Arroceros que liberaliza la nuevas puestas en riego de arrozal y saltándose alegremente las autorizaciones obligatorias para ello. Miles de has del entorno de Isla, que tenían frenada su expansión se transforman de arrozal sin tener concesión de aguas, siguiendo el ejemplo de la Administración que prácticamente ha doblado la superficie regable de la Cuenca en estos años.


Porta-contenedores, anterior a las Nuevas Esclusas.

Tras el ´92, año en el que abandono todos los cargos representativos en el sector, por razones personales, me quedo muy aislado de la problemática del agua y mucho más en el 94, 95 y 96 años en los que me voy al Chaco paraguayo a intentar una experiencia de siembra de arroz ecológico.
Para poder finalizar este trabajo pedí ayuda a Julián Borja, actual presidente de la FAS, y en el Sindicato de Isla Mayor, Fernando Carrascal, Ingeniero del Departamento técnico de las API´s arroceras, me facilitó los datos a partir del año 2001. Con esos datos y rebuscando en mis "maltrechos archivos", -utilizados para varios trabajos de fin de carrera, en los que dí "manga ancha" para utilizar toda la documentación-, he podido confeccionar este cuadro resumen de los últimos treinta y un años de nuestra problemática agua-arroz.


Año


Pluviom. Cuenca Guadalq
Aportac   embal.
R.Gen 15 de Mayo
Hm3
Presa
Alcala
%Sem En Maris
Superfi
sembr  Sevilla
Produc
Media kgs./ha.
81-82



27
100
26200

82-83



0
0
3700

83-84





27000

84/85
630
2998



30000
6500
85/86
554
2496



31000
6750
87
571
1718
1700


32000
6400
88
669
3759
1500


34000
6560
89
462
1118
800
20
33
10700

90
711
5031
1400
23

34500
6100
91
514
2097
1450
25 

35000
6408
92
485
1123
850
20 
50
20000

93
383
591
550

0
2910

94
437
1161
800


6400

95
276
356
400

0
3000

96
955
6508
2600


35000

97
907
8274
3700


+-

98
824
7160
3950


+-

99
278
811
2900


+-

2000
504
1796
2400


+-

01
766
5834
3800


+-

02
551
2243
3650


36000
8500
03
573
3378
3850


+-
8000
04
730
4801
4100


+-
8400
05
285
862
2950
30

      +-          
7703
06
462
1178
2000
25
75
26000
7300
07
505
2116
1600
20
50
20000
8600
08
491
1541
1550
20
50
18400
6600
09
509
2585
2950
30+9

36000
8500
10
1033
12000
4950
30+9

+-
8500
11
781 
Obre-Mayo 
5050
30+9

+-
9000
12
316 
Obre-Mayo 
4200
30+9

+-
9000
Media
561
2862








Con los datos que he recopilado de muy diversas fuentes; libros de Matias Rodriguez y Arzuaga, de C.H.G.,  de la FAS y de mis propios archivos estoy intentando completar este cuadro que nos da una vista panorámica de la situación de la Zona Arrocera, comparando las lluvias y el agua recogida en los embalses de la Cuenca del Guadalquivir en los últimos treinta y un año, con las superficies sembradas y el agua disponible y la autorizada por la Presa de Alcalá.
Datos comparativos:
1ª columna, datos de pluviometría de cada año hidrológico (de Obre a Sbre)
2ª.- agua entrada en todos los embalses por año hidrológico
3ª.- agua embalsada en los embalses dependientes de R. G. al 15 de Mayo
4ª.- dotación de agua en la Presa de Alcala para el sector arrocero y tapón salino.
5ª.- porcentaje de superficie sembrada en las Marismas (sin Vega de Puebla)
6ª.-superficie aproximada sembrada en zona arrocera Sevilla.
      En Negrita las superficies sembradas los años de recortes.
7ª.- media de producción por ha en los años que tengo datos fiables.
Antes de entrar en los detalles que reflejan cada una de las columnas debo aclarar que; además de los problemas evidentes de recortes de superficie hemos tenido problemas por riegos con agua salada, que han producido daños superiores a los MIL kg/ha los años: 

1982,  84,  85,  86,  87,  88,  90 y 91.  OCHO AÑOS por causa del agua salada

-83 sembramos           0
-89 sembramos         33% 
-92 sembramos         50% 
-93 sembramos            0
-94 sembramos         20%
-95 sembramos            0%
-2006 sembramos    75% 
-2007  sembramos    50%
-2008  sembramos   50% 

Sumando las pérdidas parciales de los OCHO AÑOS, por agua salada,  más las pérdidas por no sembrar total o parcialemente, en los NUEVE AÑOS señalados, el total equivale a 7 cosechas de pérdida total de cosecha.


 Podemos observar en las dos primeras columnas que la pluviometría no se refleja de forma directamente proporcional en el agua embalsada si no que intervienen diversos factores que influyen en la cantidad de agua que se recoge. Unos años con un  promedio pluviométrico más alto entrará menos agua porque las lluvias han caído más repartidas en el tiempo y con menos concentración en zonas concretas. Otros años, en cambio, con las mismas medias pluviomnétricas el resultado es bastante distinto al esperado como podemos comprobar en las campañas 2008 y 2009.  En el ´08 se recogieron 1541 hm3 en todos los embalses de la Cuenca de un promedio de 491 l/m2, en cambio en el ´09 con  509 l/m2 (sólo 18 mm, más) se recogen 1056 hm3 más en toda la Cuenca, con un resultado final total de agua útil de 1400 Hm3 en R.G. el 15 de Mayo que es la fecha realmente significativa para el arroz.
En el 2009 con las mismas precipitaciones medias que los años ´06, ´07 y ´08 pudimos sembrar  y cultivar con normalidad toda la superficie, mientras en los tres anteriores solo el 75%, 50% y 50%, por lo que en realidad seguíamos casi como en las dos décadas anteriores, en las que cada año se gasta el agua embalsada, y cuando no quedan reservas en los embalses nuestras siembras son totalmente inseguras y a expensas de las lluvias de primavera, que no sólo son muy eficaces para los embalses sino también para evitar riegos de primavera y llenar la zona arrocera con las escorrentías. Esa circunstancia reporta un ahorro de varios cientos de Hm3 en relación a un año que empiecen los riegos en Febrero.
En este año 2009, concurrió una nueva circunstancia, muy especial, en el momento de llenado de la zona que no termino de explicarme cual fue la mente brillante que la concibió . Como se concedieron 350 Hm3 al sector arrocero los 50 Hm3 que faltaban pensaron sacarlos del agua del Guadalquivir, llenado la Isla con el contenido del río. No sólo obligaron al sector arrocero a llenar del río sin soltar agua por la Presa de Alcalá, -con lo que salinidad llegó a los 7 gr/l, en marea alta, en la bomba del Poblado- sino que nos amenazaron con cortarle el agua a los agricultores que no cumpliesen la orden. Amenazando con hacer fotografías aéreas para comprobar quién no había cumplido con las fechas establecidas.
Esta Orden, cuanto menos poco ortodoxa, implica dos carencias importantes en el conocimiento del estuario y de los sistemas de riego del sector. 
En primer lugar no se ahorra agua obligando a llenar del río con agua salada ya que posteriormente tendrá que soltarse ,el agua ahorrada y más, para poder restablecer los niveles de salinidad aceptables para el arroz.  En segundo lugar los regantes arroceros, en una mayoría aplastante, son tremendamente responsables y saben de la importancia del ahorro llenando con las escorrentía. Al margen de eso, a los arroceros no hay que apretarles para que siembren pronto esa es una auto-imposición que no necesita más `presiones. Tanto es así que muchas veces se adelantan a las fechas idóneas provocando pérdidas en la semilla de siembra y en la cosecha final. Como ha ocurrido este año 2013 que conociendo las bajas temperaturas que tendríamos los días 17 al 21 de Mayo se arriesgaron a una siembra fallida sembrando los primeros días que se soltó el agua en la zona, en lugar de esperar sembrar a partir del 22 de Mayo que ya se garantizaba una temperatura mínima superior a los 10º centígrados, necesarios para una buena germinación.
Es muy importante, -siempre que sea posible-, realizar el llenado de las Marismas con las aguas de escorrentía, ya que eso significa un ahorro de 50 hm3, pero hay que saber mantener el equilibrio de la salinidad, ya que si ocurre un desequilibrio entre tomas y aportaciones del Guadalquivir, que haga subir la salinidad en el estuario y en el agua de los arrozales, la única medida utilizada para  bajar los niveles altos de sal es dar un fuerte taponazo de agua dulce, manteniendo estos niveles excepcionales de desembalse hasta que baje la salinidad del estuario y se renueve el agua salada de las parcelas. 
También podemos observar en la segunda y tercera columna que el agua embalsada en toda la cuenca no se corresponde proporcionalmente a la recogida en R.G. y así vemos en el año ´90 que mientras en los embalses de R.G. (que suponen 2/3 de la capacidad total) tenemos el 15 de Mayo, para atender los riegos 1400 Hm3, en el resto de embalses (1/3 de la capacidad) se han recogido 3600 hm3 (con una capacidad total de 1650 Hm3), lo que evidencia que en ese sector destinado a abastecimientos y zonas regables localizadas se ha estado desembalsando buena paste del año, lo que difícilmente ocurre en R.G. y que cuando están todos llenos, -una sola vez en toda su vida-, como este año 2012/13, las lluvias de primavera excedentes se aprovechan para los riegos del Bajo Guadalquivir y la Zona Arrocera.
La cuarta columna indica los m3/seg que se aprueban para el arroz en la última Comisión de Desembalse de cada Campaña y que unas veces se corresponden los acordados con los realmente soltados, y otras se le parecen, ya que es muy difícil en los años con problemas de falta de agua hacer que lleguen a Alcalá el agua que se ha desembalsado en los embalses de cabecera situados a cientos de km más arriba. En cambio, otros años, las lluvias o las ayudas desde otras áreas alivian la presión salina que se produce con el desfase entre la superficie regada y el agua prevista soltar.
Por eso comentaba Fernando en el informe del año 2008, que soltando la misma agua que el año anterior y con una superficie parecida, la salinidad era muchísimo mayor "se cuadriplicaban los índices de salinidad" según su informe. Sin embargo a mi no me extraña y sin señalar a nadie sí puedo afirmar que eso mismo nos pasaba en los años 80 en los que el agua soltada en los embalses para el sector arrocero era muy difícil hacerla llegar hasta el estuario y una vez allí todavía se perdía una buena parte en riegos, para otros cultivos, con bombas ilegales desde los canales. -teóricamente de desagüe-, o de pozos torticeros cercanos al río. 
El control de la salinidad del estuario, en el que influyen decenas de factores, debería ser relativamente sencillo, si todos los agentes que intervienen jugaran "limpio". El estuario es como un gran depósito integrado con el sector arrocero mediante unos vasos comunicantes. El agua que le aporta la Presa de Alcalá  tiene dos consumos primordiales, uno fijo de unos 10 m3/seg para mantener el tapón salino y otro factor que viene fijado por la evaporación y evapo-transpiración del sector arrocero, que en mis estudios lo fije en 0.8 m3/seg/ha, -de acuerdo a los datos tomados de la Universidad de California y de algún otros campos arroceros que tenían ese dato y de temperatura similar a las nuestra, ya que en la zona arrocera Sevillana no se disponía de esos medidas de evaporación en el arroz, aunque si se tenian para el Plan Almonte Marismas, con el que no se corresponde. El segundo gran consumo de agua viene dado por la superficie sembrada cada año que en el caso de sembrar las 25.000 has se corresponderá un gasto de 20 m3/seg. Estos datos siguen siendo válidos, para mi, por lo que si algo falla es porque hay un factor (o varios) incontrolados que distorsiona su buen funcionamiento.
Las dos columnas siguientes relativas  a superficies y producción media también debe mirarse como datos orientativos ya que éstos provienen de diferentes fuentes que no siempre coinciden y las superficies que se utilizan para su elaboración, en unos sitios toman toda Andalucía, en otros sólo Sevilla y otros parciales. Yo no dispongo de datos fiables para afirmar que son las superficies exactas pero sí puedo asegurar que tienen suficiente veracidad para que nos sirvan al propósito de ver los problemas del riego y sus causas, que derivan exclusivamente de la faltas de un margen de seguridad en las aportaciones a las zonas regables teniendo en cuenta los ciclo climáticos secos.
Excluyendo la sequía del ´91 al ´95, que además además era la continuación de una sequía general en España desde el ´89, los otros períodos secos tenían que estar previstos, -como contingencias normales-, en las concesiones de nuevas puestas en riego estatales o autonómicas. No es de recibo que en el ´83 y ´93, dos años que el arroz no se pudo regar, se pusiera en regadío  cerca de 25.000 has  de nuevas zonas regables.. ¿Que sentido tiene semejante atropello? Decía Manaute que "más valía que tres agricultores sembraran dos años de cada tres, que al contrario, sólo dos agricultores sembraran cada tres años" Por la misma razón; con un 25% de parados, que tenemos actualmente, se podría afirmar que más vale que quedase parado, uno de cada cuatro años, los trabajadores actualmente con trabajo que, en cambio, los tres que trabajan ahora lo continúen haciendo durante los cuatro años.¿?
Aunque no dispongo de datos para afirmarlo fehacintemente, considero que la situación ha cambiado sensiblemente desde la entrada de la Breña II, si es que realmente se le da el uso para el que se pensó. Es decir retomar la idea del Tharsis, - cuyo proyecto era para recoger el agua de la parte no regulada de la cuenca y la sobrante en invierno elevándola hasta el embalse para utilizarla en verano en el arrozal. El Breña II tendría la misma misión de no dejar que ese agua se pierda en el mar, elevando las sobras invernales desde el Guadalquivir al embalse, - pasando éste de una capacidad de regulación inferior a 200 Hm3/año a una superior a los 700 Hm3/año. Liquidaríamos el "pertinaz déficit de la pertinaz sequía" que sufrimos desde finales de los setenta.

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